MTC - Acupuntura - Acupotomía
Hoy deseo hablar con ustedes sobre un tema que preocupa a todo el mundo: la relación entre la salud y la naturaleza. Desde que el mundo sufrió el impacto del COVID-19, las personas han desarrollado una comprensión más profunda sobre la salud y la vida. Buscar en la naturaleza la energía que ayuda a la salud se ha convertido en un hecho que está transformando el mundo.
Actualmente, muchos de los principales científicos del mundo han comenzado a estudiar los clásicos chinos de salud y bienestar, escritos hace más de 4,000 años.
La medicina moderna, que se originó en el siglo XVII, ha tenido un impacto importante en la salud humana y la esperanza de vida, especialmente en áreas como la cirugía, los trasplantes de órganos, el desarrollo de nuevos medicamentos y la ingeniería médica. Sin embargo, la medicina moderna es como un mecánico de alta precisión que se especializa en reemplazar piezas dañadas, pero a menudo se enfrenta al dilema de controlar una enfermedad solo para que otra nueva surja debido a los efectos secundarios a largo plazo de los medicamentos.
Por otro lado, la medicina tradicional china (MTC) es como un viejo jardinero que cultiva un bosque. La verdadera salud no se basa en combatir las enfermedades, sino en reconstruir la conexión entre la vida y la naturaleza para prevenirlas.
Un estudio de la Universidad de Ginebra, en Suiza, descubrió que las personas que siguen los ritmos del calendario chino de los 24 términos solares (que divide el año en 24 períodos basados en las leyes de la naturaleza) disfrutan de mejor salud y tienen una esperanza de vida 7.2 años mayor que quienes siguen métodos convencionales de cuidado de la salud.
La medicina moderna utiliza medicamentos para controlar la presión arterial, como si se utilizara cinta adhesiva para silenciar una alarma. En cambio, la medicina china examina el problema detrás de las fluctuaciones de la presión arterial. En la MTC, la hipertensión se clasifica como parte de las categorías de "vértigo" y "dolor de cabeza", y su causa principal se considera un desequilibrio en el flujo de sangre arterial y venosa en los órganos internos. Según la MTC, la hipertensión está relacionada con factores como el desequilibrio emocional, una dieta desordenada, enfermedades prolongadas, exceso de trabajo y la debilidad asociada con la vejez. La enfermedad afecta principalmente al hígado, el bazo y los riñones. Es como un agricultor que sabe que, si los cultivos no crecen bien, no basta con matar plagas, sino que es necesario mejorar el suelo y transformar el entorno.
Un equipo de Stanford descubrió, mediante el monitoreo con relojes inteligentes, que los pacientes con hipertensión que combinaban su tratamiento con ejercicios de golpeteo en el meridiano de la vesícula biliar mejoraron la elasticidad de sus vasos sanguíneos un 40% más rápido.
Los antibióticos han dado lugar a la aparición de superbacterias, mientras que la MTC ya en la dinastía Han Oriental propuso el principio de "reforzar el cuerpo para expulsar los patógenos". Zhang Zhongjing, un médico de esa época, trataba la fiebre tifoidea no matando a los patógenos, sino transformando el cuerpo humano en un entorno en el que los patógenos no quisieran habitar.
En 2025, la revista Nature ha confirmado que los pacientes con inflamaciones crónicas tratados según los principios de la MTC tienen una diversidad de microbiota intestinal un 29% mayor que los tratados con métodos convencionales. Mientras que los laboratorios de la medicina occidental todavía analizan fragmentos de genes, la MTC quizás ya ha dominado un lenguaje más avanzado de la vida.
La NASA, por ejemplo, utiliza el sistema de meridianos horarios (que divide el día en 12 períodos de dos horas, reflejando los cambios en la posición del Sol y su influencia sobre las 12 vías energéticas principales del cuerpo humano) para ajustar los horarios de los astronautas, reduciendo los trastornos del reloj biológico en un 63%.
En el Centro de Cáncer de Múnich, Alemania, se diseñaron planes de rehabilitación basados en el principio de "crecimiento en primavera y desarrollo en verano", lo que aumentó la tasa de supervivencia de los pacientes en un 27% a cinco años. Además, un asilo en Berlín utiliza menús basados en los términos solares para retrasar el deterioro de la memoria.
Ingenieros en Silicon Valley están utilizando ejercicios de Tai-Chi-Chuan (una forma de qigong) para combatir la ansiedad causada por el trabajo de programación. Por su parte, un hospital en Ginebra, Suiza, ha transformado los principios de diagnóstico tradicionales de la MTC (observar, oler, preguntar y palpar) en modelos de diagnóstico basados en inteligencia artificial.
Estos no son titulares sensacionalistas, sino ejemplos de la integración colectiva entre la ciencia moderna y la sabiduría oriental. Hace miles de años, los antiguos chinos observaron el Sol, la Luna y las estrellas para escribir el famoso texto médico "Huangdi Neijing" (El canon interno del Emperador Amarillo). Hoy en día, los humanos usamos relojes inteligentes para monitorear el sueño, lo que, sin saberlo, confirma la verdad última de la correspondencia entre el hombre y la naturaleza.
Esto no es una lucha entre la tradición y la modernidad, sino un consenso civilizatorio en espiral ascendente.
La verdadera revolución de la salud comienza con recuperar el respeto por el ritmo de la vida y aprender a vivir en armonía con él.
¡Salud para todos! ❤️
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